Hacía varios días que lo tenía en mi mente, pero… ¿Por qué? No me lo explicaba. Mi madre estaba en la cocina cocinando, y mi hermano estaba aun durmiendo en su habitación, como ya no me volvía el sueño me levanté y baje a ver qué cocinaba mi madre.
- ¿Qué madrugadora estás hoy? -dijo mientras yo le daba un beso en la mejilla -¿Te pasa algo?
- No, solo que no cogía el sueño -contesté mientras me sentaba en uno de los taburetes.
- Las tortitas ya están, vete a por tu hermano -ordenó mientras las ponía en un plato.
- No, solo que no cogía el sueño -contesté mientras me sentaba en uno de los taburetes.
- Las tortitas ya están, vete a por tu hermano -ordenó mientras las ponía en un plato.
Subí a por mi hermano, que para mi sorpresa estaba levantado.
- Enano, el desayuno ya está -dije mientras me apoyaba en el marco de la puerta.
- ¿Tortitas? -preguntó ilusionado.
- Si, venga que se te enfrían -contesté mientras el salía corriendo.
- ¿Tortitas? -preguntó ilusionado.
- Si, venga que se te enfrían -contesté mientras el salía corriendo.
Seguí a mi hermano pero a paso lento, cuando baje ya estaba con unas cuantas tortitas y sirope. Me senté en el taburete que estaba a su lado y empecé a desayunar.
- Mañana no trabajo -dijo mi madre mientras se sentaba con nosotros.
- ¿Y eso? -pregunté.
- Me han dado el día libre, ¿queréis ir a hacer algo?
- ¡Sí! -contestó alegre mi hermano.
- ¿Mañana? No sé -dije mientras terminaba de comer y dejaba mi plato en el fregadero.
- ¿Y eso? -pregunté.
- Me han dado el día libre, ¿queréis ir a hacer algo?
- ¡Sí! -contestó alegre mi hermano.
- ¿Mañana? No sé -dije mientras terminaba de comer y dejaba mi plato en el fregadero.
Subí a mi cuarto y como de costumbre cogí la guitarra, aunque odiaba tocarla, o tan siquiera verla, era el regalo que me dio mi padre antes de abandonarnos, pero amaba la música… no podía dejar de cogerla y tocar, componer nuevas cosas, me relajaba, me ayudaba a enfrentarme.
- ¡Hey! -dijo Adam mientras entraba por mi ventana desde la salida de incendios.
- Eso es allanamiento de morada -dije mientras me giraba para verle.
- Jajaja, ¿te acabas de despertar? -preguntó mientras miraba que solo llevaba un camisón.
- ¡Calla! -respondí mientras dejaba la guitarra y cogía unos pantalones.
- ¿Te apetece hacer algo hoy? -preguntó mientras se tumbaba en mi cama.
- No sé…
- Últimamente estas algo rara, ¿te pasa algo?
- Eso es allanamiento de morada -dije mientras me giraba para verle.
- Jajaja, ¿te acabas de despertar? -preguntó mientras miraba que solo llevaba un camisón.
- ¡Calla! -respondí mientras dejaba la guitarra y cogía unos pantalones.
- ¿Te apetece hacer algo hoy? -preguntó mientras se tumbaba en mi cama.
- No sé…
- Últimamente estas algo rara, ¿te pasa algo?
No respondí, a parte que no supe cómo, yo también sabía que me pasaba algo, no sabía que era.
Después de unos minutos me fui al baño a bañarme, cuando me dirigí a mí cuarto Adam no estaba, pensé que estaba en el salón con mi hermano, avance unos cuantos pasos y vi que tenía una nota en la cama:
Después de unos minutos me fui al baño a bañarme, cuando me dirigí a mí cuarto Adam no estaba, pensé que estaba en el salón con mi hermano, avance unos cuantos pasos y vi que tenía una nota en la cama:
“Te espero en el portal no tardes, xxx”
Me di prisa, cogí unos pantalones, mi camisa con el símbolo de Batman y unas skateras, baje y me despedí de mi madre y mi hermano mientras cogí mi móvil y mis llaves.
- ¡No vuelvas tarde! -me gritó mi madre mientras yo salía por la puerta.
- ¡Hombre, 25 minutos justos! -exclamó Adam mientras se levantaba.
- No ha sido tanto -dije riendo.
- ¿Vamos? -dijo mientras me cogía de la mano y me llevaba a algún lugar.
- ¡Hombre, 25 minutos justos! -exclamó Adam mientras se levantaba.
- No ha sido tanto -dije riendo.
- ¿Vamos? -dijo mientras me cogía de la mano y me llevaba a algún lugar.
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